Una transición suave para sustituir a los conductores
El funcionamiento del teledriving consiste en que el teledriver está en una estación física y su trabajo es entregar el coche al cliente. Los clientes piden un vehículo eléctrico a través de la app Vay. A la llegada del vehículo, se suben y conducen ellos mismos hasta el destino deseado. A continuación, el teledriver se hace cargo del vehículo y lo transporta hasta el siguiente cliente, evitando pagar por una plaza de aparcamiento. Se trata básicamente de un servicio de entrega de vehículos. Los teledrivers controlan todas las funciones del vehículo, como la dirección, el freno y el acelerador, y toman todas las decisiones de conducción, garantizando una conducción cómoda y fiable. Todos han recibido formación profesional y respetan los principios de la conducción segura.
Las pruebas ya están en marcha en las calles de Hamburgo
La start-up ha recibido permiso para realizar pruebas en la ciudad de Hamburgo. Para mantener la seguridad, esto sólo se aplica a rutas predeterminadas. La tecnología lleva más de tres años probándose con coches eléctricos KIA modificados. La decisión de incorporar vehículos teledirigidos al transporte público y las pruebas directas en ciudades marcan un paso intermedio hacia la autonomía total. El objetivo de la empresa es introducir gradualmente funciones de conducción autónoma en el sistema cuando sea seguro y esté permitido. "Ahora trabajaremos con las autoridades en los próximos pasos para poder ofrecer este servicio a conductores subcontratados", afirma Thomas von der Ohe, CEO de Voy y con experiencia en las pruebas de los vehículos autónomos de Zoox. Según él, la implantación completa de la teledriving es cuestión de meses.
La conducción autónoma se está ganando la confianza de los inversores
La start-up Vay, con sede en Berlín, ha recibido casi 100 millones de dólares de inversores para desarrollar la tecnología. De momento, la empresa es de propiedad privada, por lo que no puede cotizar en bolsa. Sin embargo, hay varios inversores que ven potencial en el desarrollo de vehículos autónomos. Entre ellos están, por ejemplo, el ex director financiero de Google Patrick Pichette o la empresa Atomico. El transporte autónomo está en auge, y Tesla también trajo noticias positivas en este ámbito cuando entregó sus primeros camiones Semi eléctricos en diciembre del año pasado.
Incluso los mayores servicios de taxi no se quedan atrás
Una de las empresas interesadas en la conducción autónoma es Uber, que ha dado el primer paso con Motional. Se trata de un proyecto conjunto del fabricante de coches Hyundai y Aptiv. Uber y Motional ya han firmado un acuerdo de colaboración por diez años y actualmente ofrecen un nuevo servicio llamado robotaxis. Este llega tras el exitoso lanzamiento del reparto autónomo Uber Eats en el área de Los Ángeles. Sigue habiendo conductores seguros en los coches por si el sistema autónomo no da abasto, pero ellos también se dejarán caer a finales de este año. Podemos prepararnos para el hecho de que los taxis pronto nos transportarán sin la presencia de otros humanos.
Olivia Lacenova, analista de Wonderinterest Trading Ltd.