No habrá nuevos modelos de vehículos eléctricos en 2022
Uno de los principales elementos detrás de la reciente caída de las acciones de Tesla ha sido el anuncio de la compañía a finales de enero, de que no lanzará ningún nuevo modelo de vehículo eléctrico este año. Esto incluye el muy esperado y popular Cybertruck. Esto se debe a la escasez mundial de chips, que ha impedido a la empresa fabricar un 50% más de vehículos que el año pasado, tal y como había planeado en un principio.
Por lo tanto, Tesla pretende dirigir sus esfuerzos a aumentar la producción de los modelos existentes en las fábricas actuales y nuevas. La compañía planea reforzar la producción en Estados Unidos y Alemania; una iniciativa que puede revitalizar la salud de la empresa y sus perspectivas de futuro. [1]
Competencia creciente
Otro factor que lastra el floreciente negocio es la creciente rivalidad competencia en el espectro de los vehículos eléctricos. La cuota de mercado mundial de los coches eléctricos se ha más que duplicado en 2021, ya que las naciones de todo el mundo han adoptado los vehículos eléctricos como la máquina de conducción definitiva del presente & futuro. Tesla sigue dominando la cuota de mercado, seguida de la estadounidense Rivian y Lucid Motors. Sin embargo, la demanda en China ha ido en aumento, con empresas como Nio, XPeng y Li Auto dominando el mercado de vehículos eléctricos de la nación asiática, que ofrecen modelos inteligentes, conectados, rápidos y relativamente más baratos en comparación con los de Tesla.
Otros factores a tener en cuenta
Tesla ha sido testigo de algunos problemas de control de calidad y complicaciones con el piloto automático a principios de 2022, pero estos factores no son demasiado importantes en comparación con las crecientes tensiones geopolíticas en Europa del Este, que han alejado a los inversores de los activos respaldados por el dólar, como las acciones, y los han orientado hacia activos refugio como el oro. El conflicto entre Rusia y Ucrania tuvo importantes repercusiones en los mercados mundiales, con miedo, incertidumbre y volatilidad evidentes en los mercados de capitales y de renta variable.
Vista técnica*
Mirando a través de una lente técnica, las acciones de Tesla muestran una tendencia negativa a corto plazo, en una trayectoria neural a largo plazo. Las acciones de Tesla, que actualmente cotizan a 856 $, se mueven entre un nivel de soporte que oscila entre 824 $ y 850 $, y varios niveles de resistencia. Uno de ellos se encuentra en los 960 dólares, y otro más alto a largo plazo en los 1.230 dólares, si nos fijamos en el marco temporal diario.
El lado positivo
A pesar de ello, los últimos beneficios de la compañía, presentados a finales de enero, han sido bastante impresionantes. Sus beneficios ajustados fueron de 2,52 dólares por acción, frente a los 2,36 dólares esperados por los analistas. La empresa también obtuvo unos ingresos de 17.720 millones de dólares, 1.150 millones más de lo esperado por los analistas, según Refinitiv, con una subida interanual del 65% este trimestre.*
Además, el magnate de la tecnología planea reducir costes mediante la localización de productos, la nueva tecnología de baterías, las economías de escala y una mayor eficiencia, lo que ha quedado patente en los resultados del último trimestre del fabricante de automóviles. Con el precio de la acción actualmente cerca de un nivel de soporte significativo, esto marca como un punto de entrada atractivo para los inversores para comprar la acción menguante de uno de los principales fabricantes de automóviles eléctricos del mundo.
* El rendimiento pasado no es garantía de resultados futuros.
[1] Las declaraciones prospectivas se basan en suposiciones y expectativas actuales, que pueden ser inexactas, o se basan en el entorno económico actual, que está sujeto a cambios. Tales afirmaciones no garantizan resultados futuros. Implican riesgos y otras incertidumbres difíciles de predecir. Los resultados podrían diferir materialmente de los expresados o implícitos en cualquier declaración prospectiva.