Este enfoque le diferencia de sus competidores
Los remolques de Range Energy funcionan con baterías y están diseñados de forma inteligente para "conducirse" solos, reduciendo la carga del tractor. La eficiencia operativa también se ve reforzada por la capacidad de autoenfriarse y alimentar los sistemas de comunicación y seguridad. Además, la startup californiana se diferencia de competidores como Volvo y Tesla por ser capaz de producir baterías de tamaño similar a las de los turismos eléctricos. Además, los remolques son compatibles con cabezas tractoras tanto diésel como eléctricas, lo que podría ser una buena opción para muchas empresas en su transición hacia camiones más ecológicos y para cumplir los exigentes objetivos de sostenibilidad. Según el CEO Ali Javidan, la integración podría reducir millones de emisiones al año y ahorrar a las empresas importantes costes de combustible. Así lo confirman las pruebas realizadas el año pasado por Mesilla Valley Transportation Solutions. Según estos, los semirremolques de Range Energy pueden ahorrar más de un 36 % de combustible, y se probaron a máxima velocidad y en diversos escenarios.
Una idea que ha captado la atención de los sectores público y privado
Con el objetivo de descarbonizar el transporte de mercancías y demostrar la viabilidad de sus sistemas, Range Energy ya ha establecido varias alianzas. Según Businesswire, Dot Transportation, el mayor distribuidor de alimentos de Norteamérica, quiere evaluar el potencial de los remolques refrigerados en un proyecto piloto, mientras que Northern Refrigerated Transportation ya ha empezado a probar semirremolques en California. Entretanto, Range Energy ha ampliado su colaboración al sector público. La iniciativa de la Agencia de Control de la Contaminación Atmosférica del Distrito de Gestión de la Calidad del Aire de la Costa Sur se dedica a fabricar y desarrollar tecnología para camiones de más de 33.000 libras (más de 13.600 kg). Para fomentar aún más la adopción del sistema de remolque eléctrico, Range Energy ha puesto en marcha un Consejo Asesor de Concesionarios. Está formado por concesionarios cuya experiencia está siendo utilizada por la startup para expandirse en el mercado y acelerar la adopción de tecnologías sostenibles.
El transporte sostenible se ve frenado por una serie de factores
Mientras tanto, los semirremolques eléctricos podrían resolver al menos algunos de los retos a los que se enfrenta el transporte por carretera en la transición hacia la sostenibilidad. El inconveniente de los camiones eléctricos es que necesitan más energía y tiempos de carga más largos, lo que se ve dificultado además por la limitada disponibilidad de estaciones de carga. El mencionado Northern Refrigerated Transportation considera que los semirremolques Range Energy son más adecuados porque también pueden cargarse durante la carga normal, lo que mejora la eficiencia. No obstante, sigue habiendo otros retos. Las redes de recarga son caras y su instalación lleva mucho tiempo, por no mencionar que el coste inicial de los vehículos tampoco es el más bajo. Mientras que el coste de un camión diésel puede costar a una empresa unos 180000 dólares, para un camión eléctrico sería de más de 400000 dólares. Las propias baterías también son un problema, ya que son pesadas y reducen la capacidad de carga del camión. Al igual que ocurre con los vehículos eléctricos de pasajeros, las empresas pueden verse disuadidas por la menor autonomía y fiabilidad de las baterías en diferentes condiciones meteorológicas, lo que repercute directamente en el rendimiento. Por último, hay cuestiones acuciantes en torno a la sostenibilidad de la producción de baterías, incluida la extracción de recursos y el reciclaje de residuos.
La Unión Europea ha introducido nuevas normas
Los vehículos pesados (HDV), que incluyen camiones y autobuses, son vitales para el comercio y el transporte mundial. Pero plantean retos para el medio ambiente que deben abordarse mediante normas e innovaciones. Si nos fijamos en la Unión Europea, las emisiones de los HDV en el sector del transporte por carretera suponen más del 25% del total, según la Comisión Europea, mientras que representan el 6% del total. La solución deberían ser los reglamentos revisados del programa "Fit for 55", que entraron en vigor en junio de este año. En ellas se estipula una reducción del 45 % para finales de esta década, del 65 % para 2035 y del 90 % para 2040. La UE no sólo pretende reducir las emisiones, sino también impulsar el mercado de vehículos de emisiones cero, facilitar la expansión de la infraestructura de recarga y garantizar una red eléctrica más limpia y sostenible, entre otras cosas. [1]
Olívia Lacenova, analista principal de Wonderinterest Trading Ltd.
[1] Las declaraciones prospectivas se basan en suposiciones y expectativas actuales, que pueden ser imprecisas, o en el entorno económico actual, que puede cambiar. Dichas afirmaciones no constituyen garantías de resultados futuros y entrañan riesgos y otras incertidumbres difíciles de predecir. Los resultados pueden diferir sustancialmente de los expresados o implícitos en cualquier afirmación de carácter prospectivo.